El gobierno de la Región de Murcia liderado por Fernando López Miras aprobará este jueves la deflactación del IRPF en un 4,1%, siguiendo la senda marcada por otras comunidades del PP, como Madrid y Andalucía, y estudia la posibilidad de suprimir el Impuesto de Patrimonio. Tras Andalucía, llega el turno de Murcia. Dos días después de que la Junta presidida por Juan Manuel Moreno haya aprobado un paquete de rebajas fiscales que incluye la supresión del Impuesto de Patrimonio mediante su bonificación al 100% y la deflactación del IRPF en un 4,3%, el gobierno de la Región de Murcia liderado por Fernando López Miras aprobará este jueves la deflactación del IRPF en un 4,1%.

El objetivo de la medida, adelantada por El Mundo, es que aquellas personas que han visto incrementarse su salario para compensar en parte la subida de la inflación no pasen a tributar en un tramo superior del IRPF, teniendo que pagar un gravamen mayor, por lo que la deflactación consiste en aumentar los umbrales de cada tramo, en este caso en un 4,1%.

El ejecutivo murciano ya había indicado en mayo que aprobaría esta medida, pero entonces estimaba que la deflactación sería del 3,5%, cifra que finalmente sube al 4,1% tras mantenerse el IPC durante los tres últimos meses por encima del 10%, el mayor nivel en cuarenta años. Además, Murcia cuenta con hasta 14 deducciones en el IRPF, aplicables a una variedad de gastos e inversiones como los realizados en la vivienda habitual, donativos para la protección de patrimonio cultural o a la investigación biosanitaria, la adquisición de material escolar, libros de texto y guardería, la instalación de recursos energéticos, personas con discapacidad, o en dispositivos para el ahorro doméstico de agua, entre otras.

Por otro lado, el ejecutivo de López Miras también estudia la posibilidad de bonificar el Impuesto de Patrimonio, siguiendo la senda marcada por Madrid, que mantiene suprimido de facto el tributo desde 2009 al aplicar una bonificación del 100%; de Andalucía, que este pasado martes aprobó también una bonificación total; y de Galicia, que desde este 2022 establece una bonificación del 25%, siendo las tres únicas comunidades autónomas que tienen bonificaciones generales en el tributo. Por su parte, desde este año Murcia aplica en Patrimonio una deducción del 100% de las aportaciones a proyectos de excepcional interés público regional.

De esta forma, las comunidades gobernadas por el PP prosiguen con su política de rebajas fiscales con las que aliviar el impacto de la alta inflación en los ciudadanos. El anuncio realizado por Juanma Moreno el lunes ha provocado estos días las reacciones del PSOE, sus socios de Unidas Podemos, y otras formaciones parlamentarias como ERC, Más País o Compromís, así como de comunidades autónomas gobernadas por el PSOE u otros partidos como el PRC en Cantabria, que reclaman una reforma fiscal que armonice los impuestos cedidos a las autonomías para evitar una competencia a la baja por parte de las comunidades del PP.

Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha instado a las comunidades autónomas a evitar entrar en una competencia fiscal a la baja, porque considera que cuando la periferia compite en este ámbito con Madrid, siempre pierde la periferia. Sánchez se ha referido al debate sobre la rebaja o eliminación de impuestos anunciada por comunidades gobernadas por el Partido Popular en una conversación informal con los periodistas en Nueva York, donde asiste a una serie de actos en el marco de la apertura del nuevo periodo de sesiones de la Asamblea de Naciones Unidas.

Ante esos movimientos fiscales autonómicos, Sánchez ha considerado que el reparto justo de la carga por las consecuencias de la guerra de Ucrania lleva a exigir más a los que más tienen. A su juicio, la gran lección de todo esto es que cuando la periferia entra en una competencia fiscal con Madrid, quien siempre pierde es la periferia. Para Sánchez, la fuerza de la capital de España es grande y el resto tiene que ver cómo compite, pero siempre con políticas públicas.

Respecto a la posibilidad de armonizar algunos impuestos autonómicos, el presidente del Gobierno ha asegurado que es un debate que está sobre la mesa y que muchos ejecutivos autonómicos, tanto de derechas como de izquierda, quieren. La Comisión Europea no tiene duda de que España acometerá la reforma fiscal comprometida en el plan de recuperación en el plazo fijado (primer semestre de 2023), porque es uno de los hitos a los que está ligado el desembolso de los fondos y porque sigue siendo igual de necesaria en el contexto actual.

Fuentes de la Comisión Europea han explicado que "racionalizar" los impuestos de la forma más eficiente posible es también importante para afrontar las consecuencias de la guerra en Ucrania, aunque no han entrado a valorar medidas concretas como una eventual armonización de impuestos que incluya el de patrimonio. Bruselas está a la espera de recibir un primer informe "analítico" de España para saber por dónde podría ir la reforma y que será el punto de partida para comenzar a negociar las cifras y las medidas concretas.