El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, anunció ayer su apuesta por seguir rebajando la presión fiscal sobre los vecinos de la capital española reduciendo al mínimo legal el tipo del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a partir del próximo año. La medida, que comunicó durante su intervención en el Debate sobre el Estado de la Ciudad, supondrá para los madrileños un ahorro de 110 millones de euros en el pago el tributo.
Desde su llegada a la alcaldía, Almeida ya había reducido el tipo del IBI madrileño del 0,51% en el que se situaba en 2019 al 0,456% en el que se encuentra actualmente. El anuncio de ayer supone aprovechar las ordenanzas fiscales del próximo año para rebajar el tipo hasta el 0,4%, la cota más baja legalmente aplicable. Desde el ayuntamiento estiman que esta nueva rebaja se notará en 2,2 millones de recibos abonados tanto por vecinos como por empresas de la ciudad.
La nueva rebaja fiscal anunciada ayer por Almeida se suma al ahorro acumulado de 450 millones de euros que los madrileños habrían logrado ya, según calcula el equipo económico del alcalde, con los cuatro paquetes de rebajas fiscales sobre impuestos y tasas que se han aprobado desde el inicio de su mandato.
Así, de una parte, las rebajas ya aplicadas sobre el IBI o la llamada Plusvalía Municipal, han reducido la carga tributaria de los vecinos de la ciudad en 341,5 millones; las medidas de impulso a actividades medioambientalmente sostenibles han tenido un impacto favorable al ciudadano de dos millones de euros; y las medidas específicas de apoyo a la economía en respuesta a la crisis abierta por la pandemia de Covid han supuesto un saldo positivo para los madrileños de 110,5 millones.
En paralelo, Almeida tiene previsto impulsar en 2022 otras medidas para reducir el pago del IBI a determinados colectivos, lo que supondrá un ahorro de unos 30 millones de euros para 550.000 vecinos de la capital española. En este caso, la rebaja tributaria se articula a través de relevantes bonificaciones en el pago del principal impuesto local.
"Bajar el IBI al tipo mínimo legal antes de que acabe la legislatura", dijo ayer Almeida, "es un compromiso que tenemos como Gobierno y que queremos cumplir en los próximos Presupuestos", prometió, reivindicando el éxito de su ayuntamiento en la gestión de las cuentas públicas. Madrid, recordó, es la única ciudad de más de 500.000 habitantes que ha aprobado "en tiempo y forma" unos Presupuestos cada año. Además, agregó, en 2021 se selló "la mejor ejecución presupuestaria desde el año 2008", con la ejecución de 4.960 millones de euros del presupuesto anual, el 89,6% del total.
En paralelo a la rebaja fiscal, el alcalde de Madrid también anunció que el Área de Hacienda y Personal del ayuntamiento va a ejecutar un plan de estabilización de empleo temporal que afectará a un total de 3.229 plazas (2.205 de funcionario y 1.024 de personal laboral). El objetivo es que la tasa de cobertura temporal de la plantilla del ayuntamiento de Madrid se sitúe por debajo del 8% de las plazas estructurales, frente al 22,44% al que ascendía en junio de 2021. Los procesos selectivos deberán impulsarse antes de finales de este año, y resolverse completamente antes del 31 de diciembre de 2024.