Están recogidas en la Estrategia de Protección a la Maternidad y Paternidad y de Fomento de la Natalidad y la Conciliación 2022-2026, un conjunto de medidas "dirigidas a favorecer la natalidad y la emancipación de los jóvenes, así como otorgar mayor protección y cuidado a los hijos y a las familias, favoreciendo la conciliación de la vida personal y laboral", según explican desde el Gobierno que lidera Isabel Díaz Ayuso.
Las bonificaciones se centran principalmente en el fomento de la natalidad y de la emancipación residencial de los jóvenes. Según estimaciones del Ejecutivo regional beneficiarán a casi 100.000 contribuyentes y supondrán un ahorro fiscal de 34,7 millones en el primer año de aplicación. Las 80 medidas del conjunto del plan, más allá de la pata fiscal, tendrán un coste de casi 4.150 millones de euros durante sus cinco años de vigencia, más de 4.800 millones teniendo en cuenta las medidas que contienen también la Estrategia Madrid por el Empleo solo en 2022 y 2023.
Dentro del apartado de la natalidad, el plan mejora la deducción por nacimiento o adopción de hijos, pasando de 600 a 700 euros al año durante los tres primeros ejercicios. A su vez, hay una mejora de la deducción por cuidado de hijos menores de 3 años, del 25% de las cotizaciones a la Seguridad Social por la contratación de cuidadores.
En lo relativo al sector residencial se pone en funcionamiento una nueva bonificación por el pago de intereses de préstamos para la adquisición de vivienda por menores de 30 años. En concreto, se podrán deducir de la cuota íntegra del IRPF el 25% de los intereses de la hipoteca para adquirir su vivienda habitual, hasta un máximo de 1.000 euros anuales. En paralelo se ha diseñado otra deducción por adquisición de vivienda habitual por nacimiento o adopción de hijos. Aquí, los contribuyentes se podrán deducir el 10% del precio de adquisición, prorrateado en 10 años, de la cuota íntegra del IRPF, con un límite anual de 700 euros.
En el alquiler se amplía la deducción por arrendamiento de vivienda habitual para jóvenes, que podrán deducirse en el IRPF hasta un máximo de 1.200 euros, un 20% más del límite actual. Estos incentivos sobre la vivienda alquilada habitual llegan hasta los menores de 40 años cuando presenten obligaciones familiares o se encuentren en situación de desempleo.
Por último, el plan recoge otra deducción por la obtención de la condición de familia numerosa de categoría general o especial. Las últimas no pagarán la cuota autonómica del IRPF durante tres años, mientras que las familias numerosas de categoría general pagarán solo la mitad. También se pone en marcha la equiparación de los menores acogidos y tutelados con los descendientes en el impuesto de Sucesiones y Donaciones.