Madrid aporta la mitad de la recaudación por IVA gracias al efecto capitalidad

Madrid aporta la mitad de la recaudación por IVA gracias al efecto capitalidad

En 2021, según la estadística de resultados económicos y tributarios en el Impuesto sobre el Valor Añadido publicada ayer por la Agencia Tributaria, la recaudación nacional a través de este tributo ascendió a los 75.338 millones de euros. De ellos, 38.200 millones, un 50,8%, se ingresaron en la región central. Muy lejos quedan el resto de las autonomías. Cataluña, la segunda por peso en el cómputo estatal, recaudó 15.300 millones, mientras que Comunidad Valenciana y Andalucía se movieron en torno a los 4.500 millones. La estadística, eso sí, no recoge ni los datos de País Vasco y Navarra, con sistemas fiscales propios, ni los de Canarias, que cuenta con su impuesto general indirecto.

La razón principal que hay tras el protagonismo de Madrid no se encuentra en el volumen de consumo registrado en la zona, sino en el efecto capitalidad de la región. Tal y como explican desde la Agencia Tributaria, el elemento que se tiene en cuenta para atribuir datos en esta estadística no es el consumo, sino el lugar en el que se encuentra la empresa u organismo que crea el valor añadido sujeto al tributo.

Es decir, si una empresa que tiene su sede fiscal en Madrid fabrica un producto o presta un servicio y lo vende en distintas partes de España, el importe correspondiente al IVA se circunscribe únicamente a la región central. La estadística, por ello, sirve principalmente para analizar el peso productivo de cada región en los bienes y servicios sujetos al impuesto. Madrid, la comunidad que más aporta al PIB nacional con casi un 19% de contribución, obtiene una clara ventaja en esta clasificación. Cabe recordar, añaden desde la Agencia Tributaria, que a la hora de abordar cuestiones como la financiación autonómica se siguen criterios vinculados principalmente al consumo, y no a la producción.

El efecto capitalidad de Madrid también hace que la región central tenga el tipo medio en el impuesto más elevado de toda España: un 17,2% frente al 15,6% de la media española. También destacan otras regiones como Cataluña, Aragón, Asturias o Galicia, con tipos cercanos al 15%. De nuevo, la explicación principal se encuentra en el tipo de bienes y servicios asociados a cada región. En el caso de las zonas más industrializadas de España, por ejemplo, es lógico que el tipo medio se sitúe en niveles relativamente elevados.

Los datos de la Agencia Tributaria permiten también ver la recuperación económica tras lo más duro de la pandemia de Covid-19. España, en total, recaudó en 2021 un 16% más anual desde los 64.800 millones anotados en 2020, una recuperación en línea con autonomías como Andalucía, Comunidad Valenciana o Madrid. Algunas regiones como Baleares, fuertemente dañada por las restricciones a la movilidad y la caída del turismo, repuntó un 76% anual hasta los casi 1.200 millones. Únicamente Cantabria registró en 2021 unos números peores a los de 2020, con una caída anual del 21%.

Según el avance de liquidación recogido en los Presupuestos Generales del Estado, el año 2022 cerrará con unos ingresos a través del IVA de 81.300 millones de euros, una cantidad que se quedará corta según las principales previsiones. En 2023, según prevén las cuentas públicas, la recaudación del IVA crecerá casi un 6% anual respecto a lo previsto en 2022, hasta los 86.000 millones. El Ejecutivo, en el plan presupuestario remitido hace una semana a Bruselas, reconoció que en total ingresaría 20.000 millones más de lo proyectado en 2022 y 2023.