Así lo han reconocido en una encuesta realizada por el grupo Adecco, en la que han participado más de 4.700 jóvenes españoles, para conocer cuáles son sus perspectivas de futuro. Lo tienen claro: el 60,6% está en desacuerdo con la idea de que las facultades preparan adecuadamente para dar el salto profesional, un 30,6% asegura que los prepara solo en parte y tan solo el 8,8% considera que el paso por una universidad es una preparación exitosa para el mundo laboral.
En este sentido, los jóvenes creen que la Universidad debería fomentar la realización de prácticas en empresas durante la etapa universitaria –así lo expresan tres de cada cuatro–, incrementar el asesoramiento en materia de búsqueda de empleo y orientación laboral, el 49,2%, e impartir un mayor número de formaciones relacionadas con las denominadas habilidades blandas, el 48,7%, que hacen referencia a la combinación de habilidades sociales, habilidades de comunicación, rasgos de personalidad, actitudes, inteligencia social y emocional.
En palabras de Alberto Gavilán, director de talento de Adecco: “desde las empresas debemos hacer todo lo posible por acercarnos a los jóvenes, naturalizar nuestra relación con ellos y hacer su tránsito a la vida profesional más sencillo”. También opina que tanto universidad como empresa deben “esforzarse por ampliar modelos de colaboración innovadores donde la formación teórica y práctica se unan y preparen mejor al talento joven para el mundo laboral real”.
En relación con la elección de su futuro laboral, uno de cada tres jóvenes reconoce que nadie le ha asesorado sobre salidas profesionales y búsqueda de empleo; un 32,7% asegura que esa información la ha obtenido en su entorno cercano, como familiares, amigos o conocidos que ya trabajan, y un 19% explica haberse asesorado fuera del centro de estudios, en charlas, cursos auxiliares o sobre la materia.
Solo un 11,9% de los estudiantes asegura haber encontrado asesoramiento y orientación laboral sobre tu futuro dentro de su centro de estudios, ya fuese a través de los tutores o profesores, el 5,8%, o a través de charlas, formaciones, creadas expresamente para ello, el 6,1%. En cualquier caso, un 58% de los jóvenes consultados afirma que sí sabe dónde debe dirigir su búsqueda de empleo y cómo hacerlo, un 16,4% sabe hacia dónde enfocar la búsqueda, pero no sabe cómo materializarlo, un 15% dice saber qué tiene que hacer, pero no quiénes serían los interlocutores correctos, y un 10,6% reconoce que ni sabe dónde dirigir su búsqueda de un puesto de trabajo ni cómo hacerlo.
Los conocimientos que los jóvenes encuestados reconocen tener en relación con el mercado de trabajo son: condiciones laborales existentes –el 43,1% afirma tener suficiente información–, derechos que tienen los trabajadores –el 42,2% dice conocerlos–, habilidades más demandadas por las empresas –el 41,7% las conoce–, tipos de contrato que existen, –el 39,2% sabe cuáles son– y, por último, de lo que menos información creen tener es de qué carreras profesionales existentes en las universidades tienen más salidas laborales –tan solo afirma estar informado de ello uno de cada tres encuestados–.