El coste laboral por hora trabajada cayó en el segundo trimestre de este año un 3,8% respecto al ejercicio anterior, según el índice de coste laboral armonizado publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta bajada, la mayor en los últimos cuatro años (desde el primer trimestre de 2017, cuando descendió también un 3,8%), se debió al aumento de las horas efectivas trabajadas por la reducción de las bajas por incapacidad laboral y a la reactivación de una gran cantidad de profesionales que hace un año se encontraban afectados por los ERTE. Así, dicha bajada interanual (que es en dato desestacionalizado) rompe con la racha alcista del coste laboral por hora iniciada en el tercer trimestre de 2018.
Precisamente ha sido en las actividades económicas más afectadas por las restricciones sanitarias impuestas para combatir la pandemia donde se han producido los descensos más relevantes del coste laboral. Las mayores variaciones negativas se han dado en la hostelería (un 15,4% menos); en las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento (un 13,3% menos); y en las industrias extractivas (baja un 12%). Por el contrario, las únicas tres ocupaciones en las que ha habido una subida de los costes laborales por hora han sido las actividades financieras y de seguros (un 6,3% más); información y comunicaciones (creció un 1,5%) y las actividades administrativas y servicios auxiliares, cuyos gastos se incrementaron un 0,3%. En todas las demás hubo descensos.
Al disgregar los diferentes componentes que se incluyen dentro de los costes laborales, los salariales bajaron un 2,5% respecto al año pasado una vez corregido el efecto calendario. Donde más se han incrementado el gasto en sueldos ha sido en las actividades financieras y de seguros, con un 4,5% más; seguido de información y comunicaciones (2,2%) y las actividades administrativas y auxiliares (1,7%).
Los descensos más pronunciados los han tenido las industrias extractivas, con una gran bajada del 16,7%; las actividades inmobiliarias con un 8,9% menos y la construcción donde retrocedió un 7,2%. Por su parte, en el apartado “otros costes”, en el que se incluyen sobre todo las cotizaciones sociales, hubo un retroceso del 7,4% en dato desestacionalizado. Las ocupaciones en las que ha habido un mayor incremento de este parámetro fueron las actividades financieras (un 14,7%); seguidas, pero a buena distancia, del suministro de energía (2,2%) y de las industrias extractivas (un 1% más). En contraposición, la hostelería ha sido donde más han caído estos gastos (un 35,8%); las actividades artísticas y recreativas (28,6% menos) y las inmobiliarias (baja un 15,2%). Esto, indica el INE, se ha debido a las exoneraciones en las cotizaciones sociales.
Si en vez de manera interanual comparamos la evolución del gasto trimestralmente se observa que el coste laboral por hora también disminuye entre abril y junio en comparación con los tres primeros meses de 2021. Sin embargo, esta bajada es menor que la interanual, de apenas un 0,4% (en dato desestacionalizado). De esta forma vuelve a caer el gasto por hora después de dos trimestres (el cuarto de 2020, en el que subió un 1,5%, y el primero de este año en el que se mantuvo sin variación).
Al diferenciar entre los distintos tipos de gastos, el salarial bajó en el segundo trimestre del presente ejercicio en un 0,5%, mientras que el apartado “otros costes” también disminuyó un 0,1%. “Sin tener en cuenta el ajuste estacional y de calendario, la tasa trimestral del coste laboral es del 6,2% debido, fundamentalmente, al mayor peso de los pagos extraordinarios en el segundo trimestre de 2021 respecto al trimestre anterior”, especifica el INE. Así, si no se tiene en cuenta el dato corregido por el efecto estacional, los costes salariales se dispararon entre abril y junio un 8,4%.