Los precios en España subieron en marzo un 1,3% en comparación con el mismo mes de 2018, según ha confirmado de forma definitiva el Instituto Nacional de Estadística. En términos anuales, la luz y la gasolina se perfilan como los principales responsables del repunte en los costes para los consumidores. A día de hoy, los españoles pagamos los combustibles en su conjunto un 6,3% más caros que hace un año, mientras que la energía cuesta un 5,6% más al no haber caído tanto sus precios en el mes de marzo como ocurrió el año pasado.
En comparación con el mes de febrero, el IPC escaló un 0,4% impulsado por el transporte aéreo de pasajeros (5,7%), el vestido y el calzado (4,4% más caro); los servicios de alojamiento (3,2%) y los carburantes (2,1%). En el lado contrario, los bienes y servicios que bajaron sus precios en el mes de marzo fueron la electricidad (-3,3%), equipos de telefonía y fax (-2,8%); las legumbres y hortalizas (-2,3%); las frutas (-1,7%) y el pescado y otros mariscos (-0,6%).
La inflación es un dato muy importante para saber el cariz que tomará la economía en el futuro. Además de servir como uno de los termómetros de la situación de un país, es el dato que el Banco Central Europeo tiene en cuenta para decidir su política de tipos de interés. La institución que preside Mario Draghi tiene la misión de mantener la inflación por debajo pero cerca de un 2% en la zona euro, y los datos demuestran que, a pesar de los estímulos, los precios no terminan de alcanzar el nivel deseado por el BCE.
Si ya la inflación en su conjunto de España se sitúa lejos del 2%, el dato de inflación subyacente, aquella que se calcula sin tener en cuenta los elementos más volátiles del IPC como son los precios del carburante, de la energía o de los alimentos sin elaborar, es aún más desalentador desde la perspectiva del BCE al haberse mantenido en un 0,7% interanual durante el mes de marzo.
Por comunidades autónomas, Baleares, Castilla la Mancha y Galicia son las que más han incrementado su IPC en el mes de marzo. Canarias, Navarra y Madrid registran los avances más flojos.