El Govern de ERC y Junts vincula la recuperación con un fuerte incremento del gasto público que, por primera vez, superará en 2022 la barrera de los 38.000 millones de euros, la cifra más alta de su historia. Si se tienen en cuenta las empresas públicas, el proyecto de Presupuestos que este martes ha presentado en el Parlament el conseller de Economía, Jaume Giró, superan los 42.000 millones. Concretamente, la Generalitat prevé gestionar 38.139 millones de euros, un 17,3% que, en 2020, las últimas cuentas que se aprobaron. El Parlament las convalidó durante el primer confinamiento con el aval de Junts, ERC y los comunes, pero no tuvieron en cuenta el exceso de gasto que sigue comportando el Covid-19.
El objetivo del president de la Generalitat, Pere Aragonès (ERC), es aprobar estas cuentas con la CUP. Sin embargo, la coalición antisistema se muestra reticente y en la ecuación, entran otros aliados, como los comunes y el principal partido de la oposición, el PSC, que ganó las elecciones del pasado febrero. A la espera de ver cómo evolucionan las negociaciones, las partidas que más crecen en cifras absolutas son las de las consejerías de Salud (1.456 millones), Educación (1.009 millones) y Derechos Sociales (905 millones). Sin embargo, en términos porcentuales, los principales incrementos son para el nuevo departamento de Igualdad y Feminismos (99,1%) y el de Acción Climática, Alimentación y Agricultura (34,2%).
El incremento del gasto público es consecuencia gracias a los fondos europeos, que implicarán una inyección de 2.142 millones de euros. Ello permite compensar la caída de ingresos procedentes del modelo de financiación (978 millones) y la desaparición de las aportaciones extraordinarios del Estado a las autonomías para afrontar la emergencia sanitaria, cuyo mantenimiento ha vuelto a exigir este martes la Generalitat. Sin incluir las empresas públicas y la evolución de los pasivos financieros, el Govern prevé un incremento del gasto público de 5.618 millones de euros en relación a las cuentas prepandémicas de 2020.
El objetivo de la Generalitat es cerrar el próximo año con un déficit de 1.487 millones de euros, el 0,6% del PIB. La deuda se situará en el 33,8% sobre el PIB, 2,2 puntos menos que el dato que se prevé cerrar en 2021. Pese al fuerte incremento de la inflación por el precio de energía, y la incertidumbre que hay entre los agentes empresariales por los problemas de suministro en la cadena logística y la falta de microchips, el Govern se muestra convencido en sus previsiones macroeconómicas de que, a finales de 2022, la economía catalana alcanzará los niveles anteriores a la pandemia, gracias al incremento del consumo de los hogares y el crecimiento de las exportaciones. Sus pronósticos es que el PIB suba un 6,4% en 2021 y este mismo porcentaje en 2022 tras desplomarse un 11,5% e n2020.
La Generalitat también estima que 2022 se cerrará con una tasa de paro del 11,2%, un porcentaje inferior al promedio nacional (14,4%). El borrador de las cuentas no incorpora varias de las exigencias de la CUP, como crear nuevos impuestos y destinar el 25% del presupuesto para salud para atención primaria (queda en el 17%). Tampoco se destinarán 1.000 millones de euros en vivienda, sino 749 millones. Sin embargo, sí que contempla medio millón de euros para constituir una nueva empresa pública dedicada a la producción de energía renovable y también el Govern se abre a que, en la ley de acompañamiento, se internalice el personal de atención del teléfono de emergencias 061.
En cuanto a fiscalidad, el Govern destaca que no se crearán nuevos impuestos, aunque sí que se aplicarán varios incrementos en fiscalidad ambiental que entran en vigor en 2022 y que establecen normas anteriores. Se trata de la tasa que desde este año deben pagar los vehículos por la emisión de contaminantes y el impuesto que grava el impacto ambiental de plantas donde se genera energía y la red de alta tensión. En cualquier caso, el Govern prevé recaudar en impuestos propios 410 millones de euros, un 60% más que en 2020. En cuanto a los impuestos cedidos por el Estado, el incremento es del 11,3%. Por todo ello, la recaudación total subirá 14,4%.