El acuerdo internacional alcanzado este jueves para impulsar una regulación tributaria común para las grandes multinacionales, que implique que paguen impuestos allí donde ejercen su actividad y se sometan a un tipo mínimo de Sociedades del 15%, ha sido firmado por 130 de los 139 miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Uno de los nueve Estados que ha rechazado sumarse al acuerdo anunciado hoy ha sido Irlanda, paradigma europeo del impulso de políticas de baja fiscalidad para atraer a grandes corporaciones multinacionales a su territorio.
Irlanda cuenta con un tipo nominal de Sociedades del 12,5%, la mitad del 25% que aplican países como España, por ejemplo. Con todo, fuentes gubernamentales citadas por Reuters aseguran que el Ejecutivo irlandés apoya en buena medida el espíritu del acuerdo de la OCDE, si bien ha rehusado firmarlo por tener reservas sobre el diseño final de la norma. “No estaba en condiciones de sumarme al consenso sobre el acuerdo y específicamente sobre una tasa impositiva mínima global del 15% efectivo a día de hoy”, ha explicado el ministro de Finanzas irlandés, Paschal Donohoe, que es quien se sienta a la mesa de la negociación. Donohoe ha declarado que ha hecho públicas las reservas de su Gobierno a esta parte del acuerdo, pero ha asegurado que seguirá implicado en las negociaciones tratando de modular la medida hacia un mecanismo “que Irlanda aún pueda apoyar”.
Los responsables de las grandes potencias, por su parte, han celebrado el amplio consenso que se ha logrado alcanzar con una enorme agilidad tras años de bloqueo a una regulación fiscal global por parte de potencias como EE UU, bajo el mandato de Donald Trump.
“Hoy es un día histórico para la diplomacia económica. Durante décadas, Estados Unidos ha participado en una competencia fiscal internacional contraproducente, reduciendo nuestras tasas de impuestos corporativos solo para ver cómo otras naciones reducen las suyas en respuesta”, ha aseverado en Twitter Janet Yellen, secretaria de Estado del Tesoro de la Administración estadounidense que dirige Joe Biden, quien ha permitido dar un giro de 180 grados a la negociación por su fuerte apoyo al tipo mínimo.
“La OCDE acaba de decir que había llegado a un acuerdo con 130 países sobre una nueva tributación internacional. Doy la bienvenida a este gran paso. Es el acuerdo fiscal internacional más importante alcanzado desde hace un siglo”, ha declarado por su parte el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire en rueda de prensa.