El tono de la política fiscal debe ajustarse rápido a los contextos de incertidumbre que vive la economía mundial y la española

El tono de la política fiscal debe ajustarse rápido a los contextos de incertidumbre que vive la economía mundial y la española

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, afirmó ayer durante una entrega de premios el compromiso del BCE con mantener el objetivo de inflación en el 2%. Con este objetivo en mente, el gobernador aseguró que sería "deseable" que el tono de la política fiscal pudiera ajustarse rápido en los contextos de incertidumbre que vive la economía mundial y la española, en particular: "Una mayor intensidad de las presiones inflacionistas podría requerir un tono contractivo de la política presupuestaria".

La inflación estuvo presente a lo largo de todo el discurso, tras conocerse los últimos datos del IPC de la zona euro que lo situaban en el 10,7% en octubre y la última subida de tipos de interés del BCE de 0,75 puntos hasta el 2%, para tratar de contener la subida de precios. Cos afirmó que, pese a que el 75% de la inflación anual se debe al efecto de la energía y los alimentos, "detrás hay un componente de demanda cuya magnitud y persistencia son extraordinarias y que se traslada al consumo, lo cual aumenta la probabilidad de efectos de segunda ronda", afirmó.

Sobre el compromiso del BCE de mantener el objetivo de rebajar la inflación al 2%, expertos como el catedrático de economía e investigador del Ivie, Javier Quesada, la meta podría ser modificada "en momentos de necesidad", así lo aseguró durante el último Foro Futuro de CincoDías. Cos afirmó que el escenario en el que se trabaja es en base a ese 2% y que el objetivo de la Autoridad está en el largo plazo, no en el corto: "Nuestro objetivo no es estabilizar la inflación actual observada, sino la inflación a horizontes de unos dos años, que es el periodo en el que la política monetaria tarda habitualmente en desplegar todos sus efectos". Por tanto, los tipos de interés seguirán subiendo para cumplir este el mandato del BCE. "Nos queda todavía camino por recorrer", concluyó el gobernador.

En clave nacional, Cos abogó por la llegada a un pacto de rentas que tuviera en cuenta las "desigualdades entre los distintos grupos de trabajadores, empresas y sectores". Para el gobernador el acuerdo "debería contemplar compromisos plurianuales que atañen a los incrementos salariales, que evitaran tanto su vinculación a la inflación pasada, como a la evolución de los márgenes".

En la misma línea, Cos abogó por evitar el uso generalizado de cláusulas de indexación automática "en momentos en el que el margen fiscal se encuentra muy constreñido por el abultado endeudamiento público" y apeló por utilizar medidas de política fiscal focalizadas en los hogares y empresas más vulnerables.