El precio del petróleo brent ha superado este jueves los 80 dólares por barril. Se trata del importe más elevado desde noviembre de 2014. Este aumento se ha visto impulsado por las tensiones geopolíticas de los últimos meses en los países productores como Irán. La semana pasada el presidente de los EE UU, Donald Trump, anunció el restablecimiento de las sanciones a este país tras la salida de los norteamericanos del acuerdo nuclear firmado en 2015. Como consecuencia de estas subidas del crudo la gasolina y el diésel han superado la barrera de los 1,3 y 1,2 euros el litro respectivamente, lo que supone nuevos máximos anuales.
El brent, petróleo de referencia en Europa, ha llegado a alcanzar los 80,33 dólares por barril, frente a los 79,28 dólares del cierre del miércoles. En lo que va de año este carburante acumula una subida del 19,9% en comparación con los 66,87 dólares marcados al cierre de 2017. Por su parte, el crudo Texas —de referencia para EE UU— también ha experimentado crecidas en los últimos meses. Así, este jueves ha llegado hasta los 72,30 dólares por barril, su importe máximo desde noviembre de 2017.
Estas subidas se explican por el aumento de la tensión y la inestabilidad internacional en los países productores, lo que ha hecho que se traslade al precio del crudo. Además de la relación entre EE UU e Irán, el encarecimiento también se debe la baja producción de Venezuela, a la que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) se ha referido en su informe mensual como uno de los “principales desafíos” para el precio del crudo. También afectan la escalada de tensión en la región árabe y nuevos choques con Corea del Norte. Además, el miedo de los inversores a que se reduzca el suministro empuja el importe al alza.
Impulsado por el aumento del precio del crudo, el litro de gasolina ha aumentado el importe esta semana un 1,24%, hasta los 1,302 euros. Esto supone un nuevo precio máximo desde julio de hace tres años. Por su parte, el diésel ha marcado un nuevo pico anual y unos niveles que no se recogían desde diciembre de 2014 al situarse en los 1,207 euros, una subida del 1,42%, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).
Los precios de los carburantes continúan así con la subida que comenzó a finales de marzo y que se ve ahora intensificada por las tensiones políticas. Desde marzo de este año —cuando se registraron mínimos anuales y cambió la tendencia hacia la subida— el precio del diésel ha aumentado un 7% y el de la gasolina un 6,7%.