El Consejo General del Notariado (CGN) consolida el derecho del cliente hipotecario de elegir notaría. El organismo público presentó el pasado lunes la nueva plataforma tecnológica que usarán los fedatarios para adaptarse a las obligaciones legales que establece la nueva Ley de Crédito Inmobiliario, que entrará en vigor el próximo 16 de junio.

A través de la herramienta, las entidades bancarias podrán incorporar toda la información relativa al trámite hipotecario. El cliente podrá entonces acceder a este archivo online y seleccionar el notario de su elección para que lleve a cabo el asesoramiento previo y la posterior firma de la escritura pública.

Teóricamente, la legislación actual ya reconoce el derecho de libre elección de fedatario, pero en la práctica, las entidades dirigen al cliente a las notarías con las que trabajan de forma habitual, “estableciendo un circuito del que es difícil salir”, explicó durante la presentación José Luis Lledó, vicepresidente del Consejo General del Notariado (CGN) y miembro del consejo de administración de Ancert (empresa tecnológica del CGN que ha desarrollado la herramienta).

La nueva normativa sobre crédito inmobiliario obliga a los notarios a verificar y comprobar que la documentación que el banco entrega a los consumidores es correcta en función del tipo de préstamo que les ha sido concedido. Este proceso, que se ofrecerá de forma gratuita, deberá hacerse en un plazo de 10 días.

Asimismo, el notario deberá asesorar de forma presencial al cliente sobre las cláusulas que incluya el contrato, y asegurarse que entiende todo lo explicado a través de un test de comprensión. Por último, deberá reflejar todo el proceso en un acta notarial.

El consejero delegado de Ancert, Mario Abascal, aclaró que este servicio “permitirá la interconexión gratuita entre las plataformas de los bancos con la plataforma en la que está integrados todos los notarios”, facilitando por tanto la transmisión de información. Asimismo, hizo hincapié en el complemento de seguridad y confidencialidad que aporta la herramienta a todo el proceso, remarcado su carácter gratuito.

Por su parte, Lledó señaló que, de esta forma, se “consolida el derecho de los consumidores para elegir al notario de su confianza”. Además, facilita al consumidor negociar con el fedatario una rebaja de los aranceles que debe pagar al suscribir el préstamo, sobre el cual la ley fija un máximo del 10%.