El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha aprobado su dictamen del anteproyecto de ley orgánica de eficiencia procesal y ha respaldado la creación de tribunales de instancia, órganos colegiados que sustituirán en el primer escalón de la organización judicial a los juzgados unipersonales. En el informe, aprobado con quince votos a favor y cinco en blanco, se recuerda que ya ha habido dos intentos fallidos de reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial y se valora el anteproyecto como “un avance hacia la modernización y racionalización de la organización judicial”, informa el CGPJ en un comunicado.

Según explica, se deja atrás el modelo decimonónico del juzgado unipersonal y se pasa a un sistema de organización colegial que facilita el uso eficiente de los medios personales y materiales, con mayor flexibilidad organizativa, y que promueve la homogeneidad de criterios y prácticas, favoreciendo la seguridad jurídica y la igualdad ante la ley. En el informe se incluyen no obstante algunas puntualizaciones, ya que, por ejemplo, se considera incompleta la regulación del régimen jurídico de los nuevos tribunales de instancia. Respecto a las formaciones colegiadas que pueden crearse dentro de las secciones para estudiar asuntos especialmente complejos, advierte el CGPJ de que la regulación que fija el anteproyecto puede no ser ágil y generar desconfianza.

Para evitarlo propone, por ejemplo, que esas formaciones colegiadas se creen a partir de un turno con base en criterios objetivos, evitando los “amplios márgenes de discrecionalidad” que se dejan al presidente del tribunal de instancia. Entre los puntos positivos, destaca la novedad que supone crear, dentro de los tribunales de instancia, secciones de familia como órganos especializados de la jurisdicción civil, dando respuesta a una reivindicación de muchos operadores jurídicos y cumpliendo con la ley de protección a la infancia y a la adolescencia.

Pero recuerda también al Gobierno que esa ley obliga a crear una especialidad en infancia y familia en la carrera judicial, para formar a los jueces que trabajen en las nuevas secciones. El anteproyecto incluye también la creación de oficinas de justicia en los municipios, con las que se quiere aumentar los servicios de la administración en las zonas rurales y que supondrán el fin de los juzgados de paz.