El Pleno del Congreso de los Diputados ha convalidado este miércoles el decreto ley que rebaja al 10% el IVA aplicado en la factura de la luz y suspende el impuesto del 7% a la generación que pagan las compañías eléctricas, y lo hará en un día en el que el precio medio mayorista de la luz tocará un nuevo máximo histórico al situarse en 106,57 euros el megavatio-hora (MWh).

La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha defendido estas medidas en un momento de “precios extraordinariamente altos de la energía, imputables a un contexto complejo al que hay que prestar especial atención”. Se refiere Ribera al encarecimiento del gas natural en el mercado internacional y de los derechos de emisión de CO2 que afectan directamente a los ciclos combinados y que acaban condicionando al alza el precio de la factura de la luz de los consumidores, a pesar de que el ‘mix’ de generación está principalmente compuesto por energías limpias.

Para responder a esta situación, el Gobierno aprobó estas rebajas fiscales, de carácter temporal –la bajada del 21% al 10% del IVA será hasta final de año y la suspensión del impuesto a las eléctricas durará tres meses–, con las que espera abaratar la factura eléctrica alrededor del 12%. En el caso concreto del IVA, la rebaja se aplicará a todos los consumidores con potencia contratada hasta 10 kilovatios (kW), siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por megavatio hora (MWh), esto es el 100% de los consumidores domésticos y 2,7 millones de autónomos, según Ribera.

Además, se aplicará un IVA del 10% a todos los consumidores vulnerables severos -unos 612.000 hogares perceptores del bono social- hasta fin de año con independencia de su potencia contratada y del precio del mercado.

Estos recortes están en vigor desde su publicación en el BOE, aunque debían ser convalidados por el Congreso de los Diputados y en caso de no contar con los apoyos suficientes sería derogado. Es decir, en términos prácticos, nada cambia de este miércoles a este jueves, sino que se mantiene esa rebaja aprobada hace un mes. Pero la coincidencia de la votación estas medidas provisionales en el Congreso de los Diputados con el precio récord histórico han abierto el debate sobre la necesidad de otro tipo de medidas, puesto que, con unos precios de la electricidad en el mercado mayorista tan altos, la rebaja del IVA prácticamente desaparece.

En este sentido se ha expresado la ministra Teresa Ribera que reconoció que el problema “está íntimamente asociado al diseño del mercado mayorista con arreglo a la Unión Europea”. Ribera ha considerado durante su intervención la necesidad de “facilitar mecanismos de diseño de mercado que no hagan caer esto (precios altos del gas o del CO2) sobre los consumidores” e, incluso, ha enviado una carta al vicepresidente de la Comisión, Frans Timmermans, para realizar cambios.

“Los cortes de electricidad en China, la demanda creciente del mercado asiático, la limitación de las exportaciones desde Rusia… están detrás de una demanda de gas al alza con precios al alza, al que hay que sumar una evolución de precio de CO2 que no estaba prevista en ningún informe de la Comisión. Se hablaba de 25 euros en 2025 y 50 euros en 2030 y estas semanas ha estado entre 50 y 58 euros”, ha dicho la ministra. “La señal de precio de CO2 debe ser lo que quiso ser desde el primer día y no puede ser una guillotina para los consumidores domésticos e industriales”, ha añadido.