El BCE elevará los tipos de nuevo en 75 puntos básicos

El BCE elevará los tipos de nuevo en 75 puntos básicos

El Consejo de Gobierno del BCE se reúne hoy en Fráncfort y se da por hecho que decidirá una subida de tipos de 75 puntos básicos, la segunda consecutiva de esa cuantía tras la anunciada en septiembre. La inflación sigue sin dar tregua en la zona euro y el BCE está decidido a combatirla con un encarecimiento acelerado del precio del dinero. Pero pese a que el guion de la cita de hoy parezca ya escrito en cuanto al alza de tipos, el BCE se sigue moviendo en un entorno de máxima incertidumbre y afronta desafiantes retos. Los mensajes que lance Christine Lagarde en cuanto a la situación económica de la zona euro y sobre los próximos pasos de la institución serán clave para entender el impacto de la política monetaria en el mercado financiero y en los bolsillos de los ciudadanos en los próximos meses.

Además, el BCE tiene pendiente concretar qué hará con otras dos poderosas herramientas de su política: las compras de deuda, con la decisión pendiente de cuándo comenzar la reducción del balance, y las líneas de financiación TLTRO, cuyo atractivo está generando a la banca unos beneficios caídos del cielo a los que la institución prevé poner freno.

La previsión unánime es que el BCE elevará hoy los tipos en 75 puntos básicos, con lo que los de referencia subirán al 2% y la facilidad de depósito al 1,5%, el nivel más alto desde 2009. Se trata del tercer aumento consecutivo desde julio, cuando el BCE elevó tipos por primera vez en once años. En esa primera ocasión, la subida fue de medio punto y en septiembre, de 75 puntos básicos.

El BCE está pisando el acelerador de las alzas de tipos a la vista de que la inflación se mantiene a niveles muy elevados de forma persistente en la zona euro. En septiembre marcó un nuevo récord y los precios escalaron el 9,9% interanual, ocho décimas más que en agosto. La energía es la principal causante de la inflación, pero el alza de precios se está extendiendo al conjunto de la cesta de la compra, en especial a los alimentos, ha calado ya en el sector servicios y apunta a trasladarse a los salarios. "Las negociaciones salariales no han hecho más que empezar en un clima social tenso en toda la zona euro", advierte Franck Dixmier, director de inversiones global de Renta Fija de Allianz Global Investors.

La inflación fuerza por tanto al BCE a una subida decidida de los tipos, con la que no ampliar aún más la brecha respecto al precio del dinero en EE UU, que está contribuyendo a la fortaleza del dólar y la debilidad del euro. El aumento de las tasas entraña sin embargo el riesgo de precipitar la recesión de la economía de la zona euro. El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, reconoció recientemente la posibilidad de una recesión técnica, más cerca por tanto del escenario adverso que contemplan las previsiones de la institución anunciadas en septiembre.

El BCE anunciará la actualización de sus estimaciones de crecimiento e inflación en diciembre, en las que se espera un ajuste a la baja del PIB. Su previsión de septiembre aún apunta a un alza del PIB de la zona euro del 0,9%. En un escenario adverso, de un shock energético que se ajusta ya a la realidad actual, la contracción sería del 0,9%. "El crecimiento se debilita semana tras semana, lo que apunta a una inminente entrada en recesión, aunque en este momento es difícil calibrar su alcance. Los últimos indicadores de actividad de la zona euro confirman la desaceleración y la contracción de la actividad", explica Franck Dixmier.

Las subidas de tipos en la zona euro no se van a frenar con el alza de hoy. Uno de los grandes focos de atención de los mensajes de Lagarde estará en el ritmo los siguientes ascensos. En Citi prevén una nueva subida de medio punto en diciembre y nuevos ascensos posteriores, aunque de menor intensidad. La previsión de Pimco es similar, con subidas en 2023 ya de cuarto de punto y en el mercado se contempla que la tasa de depósito alcance un máximo del 3% a mediados del próximo año.