Economía ha tomado cartas para evitar la deslocalización de las emisiones de renta fija

Economía ha tomado cartas para evitar la deslocalización de las emisiones de renta fija

La modificación prevista de la Ley de Sociedades de Capital incluye un alivio para las empresas que solo coloquen bonos. Ya no tendrán que elaborar un informe anual de gobierno corporativo. Este es uno de los obstáculos que incentiva que los emisores acudan a otros países, como Irlanda o Luxemburgo.

La presión se intensifica para que las emisiones de renta fija vuelvan a España. La financiación a través de bonos o pagarés por parte de las grandes corporaciones se ha realizado tradicionalmente fuera, con Dublín y Luxemburgo como principales capitales de la financiación a través de bonos. La CNMV y BME llevan realizando desde hace años una intensa labor de proselitismo para que las empresas y los bancos españoles utilicen el mercado nacional para colocar bonos. Y ahora se suma el Ministerio de Economía, que relaja las exigencias de gobierno corporativo para las compañías que solo emitan deuda.

Así, el borrador de la norma que adapta los últimos preceptos europeos para fomentar la implicación de los accionistas incluye un cambio que allana los requisitos para los emisores de renta fija en España. “Se modifica la disposición adicional séptima de la Ley del Mercado de Valores para exceptuar de la obligación de publicar los informes anuales de gobierno corporativo a los emisores de valores que no tengan que difundir su informe financiero anual y a las entidades para las que España no sea su estado miembro de origen”, concreta el texto, que será aprobado previsiblemente a finales de este año.

Ahora, los emisores en un mercado regulado en España (AIAF, es el de renta fija pública y privada) tienen la obligación de publicar un informe anual de gobierno corporativo, aunque solo tengan deuda. Es un agravio comparativo respecto a lo que ocurre en otros países europeos, entre los que destacan Irlanda y Luxemburgo, señalan fuentes financieras.

La exención será para aquellas emisiones de deuda cuyo valor unitario sea de al menos 100.000 euros. El Corte Inglés, por ejemplo, quedaría libre de tener que publicar informe de gobierno corporativo si hubiera colocado sus bonos en el mercado regulado español.

Desde BME señalan que es una prioridad lograr que España sea el país de primera elección para emitir deuda por parte de las empresas nacionales. A comienzos de este ejercicio, la empresa que dirige Javier Hernani rebajó de media un 50% las tarifas de tramitación y registro de emisiones. Y hace un año y medio la CNMV puso todos los medios a su disposición para acelerar los procesos para dar luz verde a los programas de renta fija para inversores cualificados.