Calviño advierte a los agentes sociales de que no relajará su compromiso con el déficit

Calviño advierte a los agentes sociales de que no relajará su compromiso con el déficit

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, compareció en la habitual rueda de prensa tras el Consejo de Ministros para lanzar un mensaje en sentido contrario, o al menos con menor intensidad, que el lanzado el pasado lunes. Entonces Calviño emitió una seria advertencia sobre los problemas económicos que hay que afrontar a lo largo de los próximos trimestres con una inflación desbocada y persistente que lastraría el crecimiento futuro.

Tal era el grado de preocupación que convocó para hoy a los agentes sociales con el propósito de buscar un pacto de rentas y hacer frente común para lograr una salida de esta crisis de manera consensuada, o al menos intentarlo. Ayer el mensaje que quiso lanzar fue más moderado y no dirigido al conjunto de la ciudadanía, sino al resto de los integrantes de la mesa del pacto de rentas, así como al resto de países del núcleo duro europeo.

La vicepresidenta insistió en su compromiso de que España va a realizar sus deberes y cumplir con el compromiso de la estabilidad. Tal y como se contempla en la actualización del Programa de Estabilidad, en el horizonte del año 2025, el déficit público se situará por debajo del 3% del PIB, en concreto en el 2,9% del PIB, al tiempo que la ratio de deuda pública bajará del 110% del PIB, hasta el 109,7% del PIB, unos objetivos que se antojan razonables respecto al escenario de reglas fiscales europeas, actualmente suspendidas como medida de gracia para hacer frente a la pandemia de Covid.

El Pacto de Estabilidad y Crecimiento fijaba unas reglas fiscales con un límite de déficit del 3% y del 60% del PIB para la deuda pública, nivel este último que todo parece indicar que se relajará y en cierto modo se adaptará a la situación de cada país, algo que no sucederá con el déficit público.

Con este mensaje, la vicepresidenta económica se quiere sentar hoy con los agentes sociales y fijar una hoja de ruta que no va a estar exenta de sacrificios. Encima de la mesa estarán temas tan controvertidos como el compromiso de la revalorización de las pensiones en función del IPC, medida que podría consolidar en el sistema un gasto superior a los 15.000 millones de euros, cantidad totalmente inasumible en el momento actual.

La moderación de salarios de los funcionarios y del resto de los trabajadores, los beneficios empresariales o el control del gasto público, serán otros de los temas que se abordarán en la reunión tras el fracaso de la anterior ronda que no llegó a compromiso alguno por parte de los agentes sociales. Con su mensaje dulcificado, Calviño descartó que la economía española vaya a entrar en recesión, asegurando que el crecimiento se mantiene "fuerte" pese a las incertidumbres derivadas de la guerra de Ucrania, asegurando que se mantendrá este año por encima del 4%.

La vicepresidenta quiere sentarse en la reunión de hoy con un claro mensaje a favor de la estabilidad presupuestaria que hay que mantener, aunque ello suponga duros sacrificios tanto a sindicatos como a empresarios. Como segunda derivada, el mensaje de ayer iba en la línea de asegurar a los socios europeos que España es un país serio y que seguirá con su compromiso con la estabilidad y estar preparado para retomar las reglas fiscales una vez que la guerra sea historia y se decida nuevamente su aplicación, lo que parece que sucederá en 2024.