Representantes de más de 1.300 empresas están hablando alto y claro esta mañana en Madrid con su presencia en el quinto acto empresarial en favor de la conclusión del Corredor Mediterráneo de ferrocarril. Uno de ellos es el presidente de Mercadona, Juan Roig, quien ha subrayado ante los medios que se está produciendo un agravio que afecta a la mitad de la población española.
Roig ha declarado que “si queremos tener todos, las mismas oportunidades, la España circular es muy importante como complemento a la configuración de la España radial. Han estado mandando siete presidentes de distintos partidos y el Corredor Mediterráneo no está hecho”. El retraso acumulado va de 15 a 25 años, y los empresarios defienden el cumplimiento de la previsión de fin de obra en 2025.
El acto ha contado con la asistencia de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, quien se ha comprometido a tener finalizada la conexión con la frontera francesa desde Almería entre 2025 y 2026. También ha remarcado que en los tres últimos años se ha “cuadruplicado el esfuerzo inversor en esta infraestructura”. Sánchez ha desgranado cifras como los 3.000 millones licitados, los 2.000 millones en obras adjudicadas y los 1.000 millones ejecutados desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno. “En estos tres años hemos licitado una actuación por semana y mantenemos el compromiso con la finalización del Corredor Mediterráneo”, ha dicho Sánchez.
Su intervención se ha producido después de que fuera recordado el incumplimiento de promesas, respecto al calendario de las obras, por parte de sus antecesores en el ministerio de la obra pública. Con alta presión previa a su participación, Raquel Sánchez ha afirmado que en los próximos cuatro a cinco años “estarán finalizadas todas las actuaciones actualmente en obras”. Entre otros proyectos ha citado la conexión de Murcia con Madrid, Cuenca y Albacete; la conexión del puerto de Tarragona; un enlace directo de alta calidad para Granada y Málaga, o la conexión de las tres capitales valencianas en ancho europeo.
Sin querer politizar la demanda de la puesta en marcha de este pasillo ferroviario de 1.300 kilómetros, Juan Roig ha afirmado antes del inicio del evento que “nos encanta que Madrid esté conectada con 22 ciudades, pero no lo están otras como Gerona, Barcelona, Tarragona, Castellón, Valencia, Alicante, Murcia, Almería, Granada, Málaga y Algeciras. Esto es una discriminación para el 50% de la población de España”.
La iniciativa QuieroCorredor, impulsada por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), presiona para que las obras concluyan en el citado 2025 y que sea en doble plataforma de vía en ancho europeo. Pese a ello, el temor al retraso ha quedado patente en la presentación realizada este mediodía por Vicente Boluda, presidente del colectivo. “Llevamos cinco años trabajando a favor del Corredor y seguiremos el tiempo que haga falta. La infraestructura debería estar desde hace diez o 15 años y ahora podría haber nuevos retrasos”, ha afirmado Boluda, “seguimos defendiendo 2025 como horizonte y presionamos para ello”.
El presidente de los empresarios valencianos ha dado la bienvenida a la ministra de Transportes y la ha animado a “aprovechar la oportunidad que dejaron pasar sus antecesores, coger el tren del progreso”. El mensaje central en este evento empresarial, en boca del empresario naviero, es que “lo que es bueno para el Mediterráneo, lo es para el resto de España”.
El Corredor Mediterráneo enlaza Algeciras (Cádiz) con la frontera francesa a lo largo de los citados 1.300 kilómetros de vía en ancho europeo. Su construcción, presupuestada en unos 22.000 millones, facilita la conexión del tren con los puertos y el paso de la carga hacia Francia en idéntico ancho de vía. Esta mañana se ha aseverado que la puesta en marcha del corredor tal y como lo demandan los empresarios creará 15.000 empleos directos y pondrá las bases para la activación de nuevas empresas e iniciativas logísticas.