Los alimentos se han erigido en el principal factor inflacionista en el IPC y están siendo decisivos a la hora de fijar una seria resistencia para que los precios se moderen, una vez que el componente energético cede tras las tensiones registradas por efectos de la guerra de Ucrania. Los precios de los alimentos suben un 2,3% en el mes, pero arrojan un fuerte incremento del 15,4% en términos interanuales, el nivel máximo desde que empezó la serie histórica en enero de 1994.
Según se desprende de una selección de los 20 alimentos básicos que componen la cesta de la compra de una familia media española, los precios registran preocupantes incrementos en muchos de esos alimentos de primera necesidad. El precio del azúcar lidera este ranking con un incremento interanual del 42,8%, mientras que las harinas y otros cereales registran el 37,8%.
También resulta preocupante el hecho de que estos incrementos a quien más afecta son a las familias con menor nivel de renta, que están sufriendo un importante recorte en su poder adquisitivo, por lo que en muchos casos deben emplear parte de su ahorro acumulado durante la pandemia para continuar con su nivel de consumo previo a este repunte inflacionista.
Alimentos que integran la denominada dieta mediterránea también están experimentando importantes incrementos de precios, no vistos hace muchos años. Tal es el caso de las legumbres y las hortalizas, con alzas del 25,7%, el aceite de oliva con tasas del 15,7% o las frutas con registros del 12,8%. Los huevos, las patatas o el arroz, que también forman parte de la mesa de una familia media española, también han experimentado importantes incrementos del 25,5%, 19% y 16% respectivamente (ver gráfico adjunto).
Estas cifras contrastan por un lado con las subidas salariales pactadas en convenios hasta octubre, del 2,64%, 4,66 puntos por debajo de la tasa de inflación, así como con el salario medio de 25.460 euros anuales. Detrás de esta evolución de precios de los alimentos pueden esgrimirse desde los efectos derivados de la sequía, la consecuencia de la traslación de los precios energéticos e incluso al encarecimiento de la distribución por la subida de los carburantes.
La inflación subyacente, que no tiene en cuenta alimentación ni combustibles, se mantiene en el 6,2% por segundo mes consecutivo, donde ha encontrado una seria resistencia a la baja. Octubre también es el mes de la nueva temporada en el sector textil, que se tradujo en una subida mensual del 8,5%. En términos anuales, no obstante, los precios se moderan y suben un 1,4% por el efecto escalón del año pasado, por lo que la contribución del apartado de vestido y calzado es negativa en 17 décimas. Igualmente, los precios de los combustibles suben un 1,4% en el mes, pero el impacto en el IPC interanual es prácticamente neutro porque subieron algo más en 2021.
El precio de la luz restó un punto y medio a la inflación el mes pasado, según los datos definitivos de IPC publicados por el INE. Los precios de la electricidad (en el mercado regulado, el único que tiene en cuenta el INE) bajaron el 22,4% en el mes y un 15,4% en el año. Es la primera vez que los precios de la luz bajan en términos interanuales desde febrero de 2021.
Así, el apartado de vivienda, donde se engloba el precio de los suministros domésticos, ha sido el principal responsable de la caída del IPC, que pasó del 8,9% al 7,3% en octubre. El dato, adelantado a finales del mes pasado, ha sido confirmado hoy por el INE.
El dato de ese mes refuerza, así, el diferencial negativo de inflación con Europa, que se amplía hasta los 3,4 puntos toda vez que el IPC armonizado en la eurozona está en el 10,7%. Además del menor precio de la luz en la Península Ibérica y la mejor situación de suministro de gas, también ayuda el efecto escalón, puesto que la inflación repuntó en España antes que en la UE.
De las aproximadamente 200 categorías de artículos del INE, 65 presentan todavía fuertes subidas de precios, de más del 10%, y otros 43 entre el 5% y el 10%. La presión inflacionista es mucho más moderada en otras partidas, y 65 suben menos del 3%, incluyendo en esas cifras las 14 rúbricas que bajan, incluyendo electricidad.