La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) indica que esta reforma es positiva, ya que se está intentando equiparar posturas entre autónomos y asalariados. No obstante, advierte de que puede haber algunos problemas, por lo menos, con las tablas de cotización que se han fijado para los próximos años. Esto puede generar problemas y un "efecto contrario" al que realmente se pretende, señalan.
La organización piensa que los autónomos recibirán mejor trato que los asalariados a raíz de las nuevas cuotas de la Seguridad Social. Según indican, la medida es "positiva", ya que permite introducir una mayor equidad en el sistema y un mayor nivel de protección social para el colectivo. También recuerda que el objetivo que se persigue de acercar las bases de cotización a las rentas reales de los autónomos "se ve empañado al haber elaborado unas tablas para los tres primeros años, de 2023 a 2025, con una relación decreciente entre las bases de cotización y los rendimientos netos declarados al IRPF a medida que aumentan los ingresos del afiliado".
Desde Fedea alertan de que podría generarse "competencia desleal" al establecer para una parte de los trabajadores autónomos bases y cuotas inferiores al Régimen General de Asalariados para un contrato a tiempo parcial completo. Según dicen, esto podría aumentar la figura del falso autónomo.