Un total de 50.513 personas capitalizaron en el año 2021 sus prestaciones contributivas por desempleo, lo que supone un 4% más que en 2020 (48.428), aunque se trata de una cifra que queda lejos de los máximos alcanzados en 2008, con 164.196, y 2009, con 158.952. Así se desprende del informe de CCOO 'Mercado de trabajo y protección por desempleo' correspondiente al segundo semestre de este año, elaborado a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
El pago único o capitalización de las prestaciones contributivas es una medida de fomento de empleo, que pretende facilitar la puesta en marcha de iniciativas de autoempleo que consistan en iniciar una actividad laboral como trabajador por cuenta propia o en incorporarse como socio trabajador o de trabajo en cooperativas o sociedades laborales o mercantiles, en funcionamiento o de nueva creación. La prestación capitalizada puede percibirse en un pago único, en pagos mensuales para subvencionar la cotización del trabajador a la Seguridad Social o combinando ambas opciones.
El estudio detalla que, en 2021, el 86% de quienes capitalizaron sus prestaciones lo hicieron para establecerse como autónomos, el 6% como socios de cooperativas, el 1% como socios de sociedades laborales y el 7% como socios de sociedades mercantiles, según apunta Servimedia. El informe destaca también la "importante caída" del trabajo autónomo a lo largo de los años a partir de la capitalización del desempleo, ya que, desde 2009, cuando se alcanzó el mayor número de capitalización de las prestaciones para establecerse como trabajador autónomo, la cifra se ha reducido un 72% (43.334 en 2021).
En opinión de CCOO, esto muestra "el efecto huida que en ese periodo se produjo hacia el trabajo autónomo, si bien con escaso éxito en muchas de las iniciativas de empleo autónomo y de las tarifas planas destinadas a impulsar estos empleos para reducir las cifras de paro". En el pasado año, según el informe de CCOO, se capitalizaron 283 días de media por trabajador, 44 días más que en 2020 y, consecuentemente, la cuantía líquida media por trabajador, de 8.223 euros, es un 21% superior a la del año anterior.